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La Universidad Complutense restaura el quirófano de Juan Negrín

Pie de foto: zona de ante quirófano.

 

La Universidad Complutense de Madrid inaugura el 7 de febrero de 2020 El legado de Juan Negrín, un aula histórica que recupera el quirófano original de experimentación animal del Instituto de Fisiología que dirigió el científico y estadista canario en la primera mitad del siglo XX.

El acto estará presidido por el rector de la UCM, Joaquín Goyache Goñi, y contará con la participación de la presidenta de honor y del presidente de la Fundación Juan Negrín de Las Palmas, Carmen Negrín Fetter y José Medina Jiménez, respectivamente.

Intervienen también el decano de la Facultad de Medicina, Javier Arias Díaz, la directora del departamento de Fisiología e impulsora del homenaje, Asunción López-Calderón Barreda, y el catedrático de Historia Contemporánea Luis Enrique Otero Carvajal, que pronunciará la conferencia El Laboratorio de Fisiología de Juan Negrín en la edad de plata de la ciencia en España, 1916-1936.

 El Laboratorio de Fisiología General se creó originalmente en la Residencia de Estudiantes de Madrid en 1916. En 1934  fue trasladado al Instituto de Fisiología ubicado en la entonces nueva Facultad de Medicina, donde ahora se reabre el quirófano restaurado.

 Todo el equipamiento que se muestra es histórico. Las lámpara y las mesas de cirugía, la autoclave y los otros sistemas de esterilización permanecieron en su emplazamiento original, mientras que algunas piezas de menor tamaño, -como el aparato de ventilación asistida o la balanza de pesar animales grandes- fue precisos buscarlas y recolectarlas  en distintos espacios del Departamento de Fisiología.

 Según explica la profesora López-Calderón, “todo lo que se muestra es original y para su época eran de la máxima calidad, muy similar a los aparatos utilizados en los quirófanos para cirugía en seres humanos. El laboratorio estaba dotado con los medios más avanzados para su época.”

 Juan Negrín López (Las Palmas de Gran Canaria, 1892 – París, 1956) dedicó su vida a la ciencia, antes de decantarse por la política y llegar a la jefatura del consejo de ministros (1937-1945).

Médico formado en Alemania, dirigió el Laboratorio de Fisiología General de la Residencia de Estudiantes de Madrid (1916-1936) por invitación de Santiago Ramón y Cajal, que presidía entonces la Junta de Ampliación de Estudios.

Negrín creó una brillante escuela de fisiología. Formó a 14 catedráticos de Universidad, de los cuales cinco se quedaron en España tras la guerra y nueve marcharon a México y EEUU. Entre sus alumnos figura el premio Nobel de Medicina Severo Ochoa. Su hijo mayor y discípulo,  el doctor Juan Negrín Jr., recibió con la Medalla de Oro de la Ciudad de Nueva York por sus méritos como neurocirujano con motivo del 200 aniversario de la fundación de Estados Unidos.

Aparte de una escuela de científicos, el laboratorio legó investigaciones sobre instrumentos de laboratorio, medicamentos y vitaminas.

En 1921 Negrín ganó la cátedra de Fisiología de la Universidad Central (antecedente de la Complutense) y en 1923 fue nombrado secretario de la Facultad de Medicina.

 La exposición “El compromiso científico de Negrín”, producida por la Fundación Juan Negrín en 2018, mostró el cuaderno con  anotaciones manuscritas sobre su diseño de la carrera de medicina.

Según recoge Otero Carvajal, Negrín impulsó la creación en la Universidad Central del Instituto de Comprobación de los Medicamentos, que dirigió el canario José Domingo Hernández Guerra hasta su muerte en 1932, y la Escuela de Educación Física y Medicina del Deporte, de la que se hizo cargo Blas Cabrera Sánchez. En 1927 el futuro jefe de gobierno fue designado secretario ejecutivo de la Junta Constructora de la Ciudad Universitaria.