“Sin duda salimos de la crisis, en mi sector (el automóvil) hay brotes verdes, rojos … de todos los colores”, afirmó este viernes el empresario Sergio Alonso en el marco de las Entrevistas abiertas de la Fundación Juan Negrín.
El presidente del Grupo Domingo Alonso respondió durante cerca de una hora a un amplio cuestionario formulado por la periodista Teresa Cárdenes y a algunas preguntas planteadas por el público que intervino al final en el debate.
El empresario habló sobre educación, moratoria turística, crisis, corrupción y la situación griega, entre otros asuntos de actualidad, a instancias de la periodista.
Precisó que hay “gente muy seria y muy trabajadora en la política”, después de señalar que “la financiación de los partidos siempre ha sido un problema que se ha ido tolerando en España”.
“No es que tengamos gobiernos corruptos, es que estamos en un sociedad corrupta”, puntualizó en este bloque.
Criticó que la educación en España se base en la memorización de contenidos y tildó este hecho de “disparate”.
A renglón seguido abogó por “enseñar a discernir para evitar pueblos manipulables” y lamentó la circunstancia de que en España no haya ideologías, sino partidos.
Alonso mencionó en varias ocasiones el concepto “zona de confort” para referirse a una actitud que impide emprender y que es propia de sociedades que quieren ser tuteladas. En esta zona de confort están las universidades, según el ejemplo que puso, institución que, como otras, están demasiado politizadas en su opinión.
Respecto a las oportunidades que tiene Canarias para desarrollar su economía, el empresario citó dos ejemplos: conseguir que nuestro sistema sanitario privado y público alcance el prestigio necesario para que personas que ahora viajan a otros lugares a tratarse lo hagan a las islas; y que nuestro clima sea un imán para personas que trabajan a través de internet. “Ahora no hace falta estar en Silicon Valley para producir”.
Sin embargo, subrayó: “Es obligado salir fuera, no podemos solventar los problemas en este pequeño territorio que tenemos”.
Está convencido de que la moratoria turística jamás debió aplicarse y de que se puso en marcha para favorecer intereses de Tenerife; también de que es peor el derroche que el desequilibrio a la hora de invertir el presupuesto regional.
“Me preocupa más la mala gestión que si la inversión se hace en un sitio o en otro”.
El presidente del Grupo Domingo Alonso no teme que ocurra algo parecido a lo que sucede en Grecia porque no cree “que el español sea tan tonto” . A este respecto señaló: “La postura alemana es muy sensata, no se puede jugar como lo han hecho los griegos”.