27 fotografías y otros documentos del Archivo Negrín reflejan la gran relación de amistad que hubo entre la familia Negrín y la actriz de origen español, de cuyo nacimiento se cumplen cien años en 2022
La hija de Santiago Casares Quiroga encontró en Feli y don Juan, cariño y consuelo tras la muerte de su padre
Las Palmas de Gran Canaria, 26/12/2022
Un total de 27 fotografías y otros documentos conservados en el Archivo Juan Negrín dan testimonio de la estrecha relación de amistad que existió entre el doctor Juan Negrín López, su pareja, Feliciana López de Dom Pablo, y la actriz María Casares durante la época del exilio en París.
Este 2022 se cumplen cien años del nacimiento en La Coruña de María Victoria Casares Pérez, la hija del político republicano Santiago Casares Quiroga, que llegaría a convertirse en estrella del cine francés y en gran dama de la Comédie Française, y cuya relación con Albert Camus forma parte de la historia sentimental del siglo XX.
Juan Negrín, y tras su muerte en 1956, su viuda, Feli (aunque nunca llegaron a contraer matrimonio), actuaron como padres postizos de la actriz, huérfana desde 1950 y visita habitual del piso del distrito XVI de París donde aún hoy continúa viviendo la familia Negrín y donde María Casares siempre fue “María”.
“Venía a menudo a casa, a veces con Camus. Y a veces con (el actor) Gérard Philippe. Tenía una voz muy particular, ronca, de fumadora. Se llevaba muy bien con Feli, siempre le traía regalos muy bonitos”, relata Carmen Negrín.
La presidenta honoraria de la Fundación Juan Negrín y su hermano, el antropólogo Juan Negrín Fetter (México, 1945- 2015), llegaron con apenas 3 y 5 años a París para vivir con el abuelo debido a la grave enfermedad de la madre de ambos. Tras la muerte de Juan Negrín, Feli haría las veces de madre, hasta que ella misma enfermó y regresó a España, donde murió de alzheimer en 1987.
“María Casares fue una de las últimas personas del exilio que la vio en París antes de su marcha; en su libro “Résidente privilégiée” habla de Feli como una mujer de la que podíamos estar orgullosas el resto de las mujeres”, añade Carmen Negrín.
Una de las fotografías que se conservan en el Archivo Negrín es un retrato de María, sobre el que la actriz escribe la siguiente dedicatoria: “A Feli, mi hada, con cariño, con besos, con todo lo que la afección lo más grande pueda dar para siempre. Palabra de española … pura”. Firmado “María Victoria”.
Santiago Casares Quiroga, el padre de María, -presidente del gobierno de la 2ª República durante unos meses de 1936 y varias veces ministro- muere en 1950. A María, que ya era huérfana de madre, la consuelan Negrín y Feli. La relación continúa en el tiempo y solo termina con la muerte de sus protagonistas.
«¿Cómo vas querida Feli? ¿Cómo va D.J.?»
Otro documento conservado en el Archivo de la Fundación Juan Negrín es una postal turística enviada desde Brujas en octubre de 1953 donde la actriz cuenta a la familia Negrín que está “gozando de la poesía de los canales”. La postal termina así: “¿Cómo vas querida Feli? ¿Cómo va D. J.? Un abrazo muy fuerte para los dos y todo mi cariño profundo y fiel”. Firmado: “María Victoria”.
Este documento lleno de optimismo contrasta con las páginas arrancadas de una agenda de junio de 1940 en las que Juan Negrín anota el apellido de varias personas formando una lista. Junto a cada nombre, el aún jefe de gobierno de la 2ª República en el exilio apunta una equis y un número. Al lado del apellido Casares aparece un “x 3”, por el número de miembros de la familia del político gallego que debían ser evacuados al Reino Unido. Tras la ocupación alemana, Francia ya no era un lugar seguro para los líderes republicanos españoles.
En esta lista además del apellido Casares aparece Azaña (Manuel); Caballero (por Largo Caballero); Lamoneda (secretario general del PSOE); Companys (presidente de la Generalitat) y el propio Negrín, entre otros líderes políticos y sindicales de la España republicana.
Carmen Negrín recuerda las noches en las que, siendo muy niños ella y su hermano Juan, Feli entraba en la habitación para darles un beso antes de salir con don Juan rumbo al teatro envuelta en una nube de Vol de Nuit (un perfume de Guerlain) para asistir a un estreno de María Casares, normalmente en el TNP (Teatro Nacional Popular)
“Asocio en parte a María a esas noches en las que Feli venía a darnos un beso y salía elegante y perfumada, un poco como la madre de los amigos de Peter Pan al principio del cuento”. Al día siguiente nos mostraba el programa de mano y nos comentaba la obra. Volví a ver a María en lo que creo que fue su última representación en París. Estaba ya muy mayor y su voz más temblorosa y ronca que nunca. También su risa era especial, fuerte y franca”.
De la relación entre Negrín y Albert Camus también hay evidencias. En 1953, el Premio Nobel escribió la siguiente dedicatoria: “Au docteur Juan Negrin ce petit gage d’admiration pour son grand pays avec la fidèle pensée d’Albert Camus” (Al doctor Juan Negrín esta pequeña muestra de admiración por su gran país con la fiel consideración de Albert Camus), en un ejemplar de su traducción al francés de la obra de Pedro Calderón de la Barca “La devoción de la cruz” publicada ese año por Gallimard.
Este libro formó parte de la exposición “La Biblioteca errante. Juan Negrín y los libros”, producida por el Instituto Cervantes de París y la Fundación Juan Negrín en 2015. La reproducción de la dedicatoria manuscrita de Camus se eligió para ilustrar la portada del catálogo.